¡Felíz día chei!
Desde hace 40 años, gracias a una iniciativa del gobernador estadounidene Gaylord Nelson, comenzó a conmemorarse en esta fecha, con la intención de crear conciencia en la población mundial sobre los riesgos y daños inconscientes que se le están haciendo a "nuestra casa".
Muchas personas van a transcurrir este día como uno más, otros siquiera sabrán qué se festeja. Pero es un buen momento para que poco a poco comencemos a descubrir y entender qué le está sucediendo al planeta: el cambio climático no se da "porque el tiempo está loco", el ser humano no se quema más la piel "porque el sol está fortísimo", las distintas especies no se extinguen porque han cumplido su ciclo de vida, el aire se envicia porque hay algo y alquien que lo está contaminando...
Reflexionemos, la tierra nos está poniendo en alerta desde hace mucho, y cuando todos los avisos que pudo hacer se agotaron (y nosotros seguimos como si nada), ella nos escarmienta con las lamentables catástrofes que nos tocan sufrir.
Hagamos algo al respecto, castigándola nos lastimamos a nosotros mismos. No olvidemos que este suelo que pisamos hoy, será el que pisen el día de mañana los que nos sucederán.
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